El infierno del alzheimer

Subiré esta entrada como entrada excepcional, no tiene que ver con vuelta al blog.
Nunca he hablado de mi abuela Carmen pero más vale tarde que nunca. Mi abuela nunca ha sido una persona fuerte físicamente, tiene los ojos azules y la cara pequeñita. Siempre se ha dado a los demás y yo siempre la he conocido cocinando y haciendo muchísimas cosas en casa. También la he conocido quejándose a mi y a mis primos por jugar al fútbol en su porche.

Mi abuela comenzó a ser más débil que yo me acuerde hace un año, comenzó a quejarse de dolores, a moverse más lentamente, a hablar más despacio y a costarle muchas cosas. Pero hace unos 3 o cuatro meses mis padres me comunicaron que mi abuela sufría alzheimer. Yo más o menos ya sabía lo que significaba esa palabra. Pero no sabía de la gravedad de lo que suponía esa enfermedad. Yo sabía que se olvidaban muchas cosas, pero ni de lejos me imaginaba lo que podía pasar.

Ni de lejos sabía que no se acordaría de como se hacen la mayoría de las cosas. Ha hecho muchas cosas que han puesto en peligro su salud, y esas cosas me han preocupado muchísimo, ya que para mi la familia es una de las cosas más importantes que hay y por lo tanto me preocupo por quien me quiere. Ya me he acostumbrado a que no me reconozca, o a que se le olviden muchísimas palabras, pero me tiene muy preocupado alguna cosa que pueda hacer. Intento no pensar en lo mal que lo puede estar pasando, pero yo creo que ella en el fondo está contenta, aunque no tenga motivos para estarlo. Sigo pensando en lo que era antes y lo cruel que puede ser una enfermedad para arrebatar todos los recuerdos de una persona y todos los hábitos que tenía.

Cada día cuando me hablan de ella me imagino en lo que tiene que ser un infierno. Yo haré todo lo que pueda para que ella sea la persona más feliz del mundo, y siempre estaré orgulloso de ella porque se que nunca dejará de luchar. Porque siempre nos ha querido y siempre nos querrá.

Ahora también hablaré de lo mal que lo pasa mi familia, por ejemplo mi madre muchas veces llega cansada a casa, solo tiene ganas de dormir, y básicamente porque quiere a mi abuela, y por sacrificio hacia los demás va a su casa, le da un beso y le pregunta como está. Solo porque le quiere, y eso dice mucho de una persona. Pero no solo sufre mi madre, sufrimos todos los integrantes de una familia por un mismo motivos, solo queremos que ella pase todo lo bien que se pueda el infierno por el que seguramente pasa.


Me veía en necesidad de hacer esta entrada porque mañana es el día mundial del alzheimer y por que mi abuela se lo merece, y no solo ella si no todas las personas que sufren esta enfermedad. Espero haber explicado todo lo bien que se pueda esta cosa tan cruel. Solo quiero decir que me parece que es demasiado duro arrebatar tan brutalmente todos los recuerdos de una persona. Muchas gracias por estar ahí siempre y hasta luego.

En esta foto estoy con ella, pero cuando ve está foto dice que está con su hijo


Comentarios

Entradas populares de este blog

Especial día del asperger

Relato de una humillación